El director del Instituto Nacional de Estadística (INE), Rubén Aguilar, presentó hoy la actualización de la canasta básica de alimentos y de las líneas de pobreza y pobreza extrema para Bolivia, luego de tres décadas de su vigencia.
“Hay razones económicas y técnicas para que el INE realice la actualización de los indicadores de pobreza; la coherencia económica que debe existir para medir correctamente con base a los criterios de la realidad actual. Por otro lado, el INE (…) ya no debe monitorear la canasta básica de alimentos de hace 30 años que con toda seguridad estarían sesgados”, afirmó Aguilar.
La institución informó, mediante una nota de prensa, que la línea de pobreza extrema representa la cuantía monetaria mínima para adquirir una canasta básica de alimentos que permita cubrir las necesidades nutricionales diarias de una persona.
En tanto, indicó que la línea de pobreza además de considerar los gastos alimentarios, incorpora otros gastos esenciales en bienes o servicios no alimentarios como ser: la vestimenta, la salud, la educación, los servicios básicos, la vivienda y otros.
El director del INE explicó que hasta 2019 se realizaba la medición de las líneas de pobreza para el área urbana, con base en la Encuesta de Presupuestos Familiares 1990-1991, mientras que para el área rural se usaba la Encuesta de Evaluación de Impacto del Fondo de Inversión Social de 1997.
En esa línea, señaló que desde este año la actualización de las canastas básicas de alimentos para las ciudades capitales, El Alto, resto urbano y rural se calculan a partir dela Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF) 2015-2016.
La institución indicó que para 2019 el 12,9% de la población en Bolivia se encuentra en condición de pobreza extrema y el 37,2% en situación de pobreza.