Observatorio del Derecho Humano a la Vivienda Adecuada

Mejoramiento Integral de Barrios

Diversos son los estudios y reflexiones que se han realizado en cuanto a la situación que viven los barrios periurbanos o marginales en América Latina, sin embargo las acciones concretas realizadas en estas zonas son cortas o limitadas, especialmente en Bolivia. Los fenómenos y experiencias suscitados a lo largo de los últimos años con relación a los procesos de urbanización y crecimiento de la ciudad “no planificado” en el territorio boliviano representan el fundamento para hacer visible la necesidad de contar con un modelo de intervención en el ámbito del Mejoramiento Integral de Barrios y que al mismo tiempo promueva el ejercicio del Derecho a la Ciudad.

El Modelo de Mejoramiento Integral de Barrios (MIB) desarrollado por la Fundación de Promoción para el Cambio Sociohabitacional PROCASHA desde el año 2013 al 2021, inicia con la intervención en la Junta Vecinal Plan 700 San Miguel que materializa y valida este modelo, ante la eficiencia e incidencia local generada en su entorno, el modelo MIB crece y se replica en los barrios circundantes, progresivamente en la Junta Vecinal Plan 700 Alto y en el  asentamiento La Pampilla que corresponde a la OTB Chaska Rumy. 

Fases del proyecto MIB en el tiempo

2013 - 2015 Cooperativas de Servicio para el Mejoramiento y Construcción Habitacional
2016 - 2018 Junta Vecinal Plan 700 San Miguel
2019 - 2021 Junta Vecinal Plan 700 Alto - Asentamiento La Pampilla

El modelo MIB se sustenta en 2 elementos de relevancia, por un lado “El Derecho a la Ciudad” y por el otro la construcción de Comunidades Urbanas. Del Derecho a la ciudad se asumen los siguientes puntos como elementos a desarrollar por la metodología de intervención:

Distribución espacialmente justa de los recursos (dimensión material), pues el derecho a la ciudad prevé una distribución y planificación de los recursos materiales social y espacialmente justa, asegurando buenas condiciones de vida en todo el continuo de asentamientos urbanos. Estos recursos deben ser accesibles tanto en zonas urbanas como en asentamientos informales. Incluyen: el espacio público, infraestructura-servicios básicos, sistemas de transporte adecuado, medios de vida y oportunidades equitativas, zonas verdes y de conservación de los ecosistemas, naturales y sin riesgo.
Agencia Política (dimensión política), pues el derecho a la ciudad se hace efectivo cuando las estructuras, los procesos y las políticas gubernamentales permiten a todos los habitantes, en tanto actores sociales y políticos, ejercer la ciudadanía en todo su contenido y significado. Junto con las diferentes esferas de gobierno, los habitantes de todos los asentamientos (incluyendo los habitantes temporales y en transición) deben poder ser protagonistas en la reconstrucción y configuración de su entorno de vida.
Socio cultural (dimensión simbólica), donde el derecho a la ciudad reconoce plenamente la diversidad y la diferencia en materia de género, identidad, prácticas culturales, y expresiones socioculturales. Este pilar exige el reconocimiento de la cultura, las relaciones vecinales y la participación de los actores como palanca para la cohesión social, el capital social, la innovación, la seguridad en la ciudad, la autoexpresión y la identidad. Es necesario que la ciudad genere posibilidades de encuentro, interacciones y conexiones activas, en las que las relaciones recíprocas y la comprensión mutua impulsen una forma renovada de vida urbana.

Estos elementos que se desprenden del derecho a la ciudad representan más que postulados teórico conceptuales en el seno de la metodología, pues el cumplimiento del mismo deber ser entendido por la población como el derecho de integración, de consolidación de la ciudad en base a las necesidades de la misma, es un planteamiento y posición reivindicativa por sobre todo. Por esta razón un proyecto de intervención barrial de esta índole, representa más que el cumplimiento de acciones de mejoramiento, pues implícitamente debe de promover una postura por parte de los participantes para la demanda de sus derechos, el cumplimiento de sus necesidades y el ejercicio pleno de su ciudadanía.

Objetivo de desarrollo

Implementar las bases de un modelo de comunidad urbana con igualdad social, equidad de género y generación, sostenibilidad ambiental y condiciones de vida y hábitat adecuados que promuevan una ruta hacia el ejercicio del derecho a la ciudad.

Líneas de acción

  • Asesoramiento técnico en procesos de regularización del derecho propietario para la tenencia legal del suelo
  • Mejoramiento de vivienda a traves de autoconstrucción con asistencia técnica
  • Diseño urbano participativo
  • Incidencia política
  • Formación y liderazgo ciudadano

Escalas de intervención

En cuanto a la ejecución y cuerpo del proyecto, podemos mencionar que se han logrado identificar cuatro escalas de intervención:

Suelo donde se aborda el tema de seguridad jurídica sobre la tenencia del suelo, donde se realiza el seguimiento, asesoramiento e información a los vecinos sobre aquello que corresponde al proceso de regularización del derecho propietario. Así mismo se procura la reflexión conjunta con los participantes sobre la necesidad de establecer mecanismos que pongan freno a la especulación del suelo.

Vivienda  es donde se prevé trabajar el brazo físico operativo del proyecto, que se enfoca en aquello que corresponde a: 1) El tema de seguridad jurídica sobre la tenencia de tierra, donde se realiza el seguimiento, asesoramiento e información a los vecinos sobre aquello que corresponde al proceso de regularización del derecho propietario. 2) El relevamiento físico espacial del territorio a intevenir. 3) El mejoramiento o construcción de vivienda nueva bajo la modalidad de autoconstrucción asistida.

Barrio donde confluyen elementos sociales y otros vinculados al desarrollo integral, en este nivel se abordan los siguientes temas: 1) Diseño participativo de actividades vinculadas al desarrollo barrial, resultantes de la Brujula de planificación urbana. 2) Implementación de mejoras barriales para la consolidación de la comunidad urbana.

Incidencia política donde se prevé: 1) Implementar acciones de Incidencia Política para el reconocimiento de la propuesta (total o parcial) en los diferentes niveles de gobierno. 2) Implementar participativamente acciones de incidencia para difundir la propuesta de Mejoramiento de la Producción Social del Hábitat en barrios periurbanos con operadores públicos, instituciones de la sociedad civil y organizaciones barriales. 3) Implementar participativamente acciones de incidencia para difundir los principios y valores promovidos en la Carta del Derecho a la Ciudad.

Alianzas colaborativas

Financiadores

El Servicio de Liechtenstein para el Desarrollo (LED) (2016-2018), MISEREOR (2016-2021), SELAVIP (2019-2021).

Archivos de consulta:
Memoria Institucional de la Fundación para la Promoción del Cambio Sociohabitacional PROCASHA, 2018.

Construyendo Comunidades Urbanas Autogestionarias y Solidarias

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Viviendas mejoradas
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Baños